El retrato de Dorian Gray (original en inglés: The Picture of Dorian Gray) es una novela que escribió el autor irlandés Oscar Wilde, publicada en el Lippincott's Monthly Magazine el 20 de junio de 1890. Posteriormente, Wilde revisaría la obra, haría varias modificaciones y
agregaría nuevos capítulos. La versión modificada fue publicada por Ward, Lock, and Company en abril de 1891. Ward, Lock, and Company
reeditó el libro en 1891 y nuevamente en 1895. Luego, Charles
Carrington compró los derechos de la obra y la editó en 1901, 1905 y
1908. En 1908 y 1909, aparece una edición ilustrada por Paul Thiriat,
Brendon & Son, Ltd. En 1913, 1916 y 1918, la novela es editada por
Simkin, Marshall, Hamilton, Kent & Co., Ltd., con una nota
bibliográfica sobre las ediciones citadas y una advertencia sobre la
existencia de ediciones piratas que se caracterizaban por la ausencia
del prefacio y por la "mutilación de muchos pasajes".
El retrato de Dorian Gray es considerada una de las últimas obras clásicas de la novela de terror gótica con una fuerte temática faustiana, además muestra un pintor con afecto íntimo y directo con el personaje principal. El libro causó controversia
cuando fue publicado por primera vez; sin embargo, es considerado en la
actualidad como «uno de los clásicos modernos de la literatura
occidental.»
Argumento:
La novela inicia cuando Lord Henry Wotton observa a su amigo Basil
Hallward pintando el retrato de un hermoso joven llamado Dorian Gray.
Dorian llega poco después y conoce a Lord Henry. Lord Henry charla sobre
su propia idea del mundo y Dorian comienza a convencerse de que la belleza
es lo único que vale la pena tener en la vida y desea que el retrato,
que Basil está pintando, envejezca en su lugar. Bajo la influencia de
Lord Henry, Dorian comienza a explorar sus sentidos. Una noche descubre a
Sibyl Vane, una actriz que trabaja en un sórdido teatro interpretando
obras de Shakespeare.
Dorian le propone matrimonio. Sibyl cuenta sus planes a su madre y a su
hermano, refiriéndose a su prometido como “Príncipe Encantador”. Su
hermano, James, advierte que si el “Príncipe Encantador” le hace daño alguna vez, él lo matará. Dorian invita a Basil y Lord Henry a ver actuar a Sibyl en su representación de Romeo y Julieta.
Pero Sibyl, embargada por la emoción del próximo matrimonio y enamorada
de Dorian, pierde interés en el teatro, por lo que esa noche interpreta
pésimamente a Julieta. Después de la función, Dorian rechaza a Sibyl
diciendo que su belleza radicaba en su arte y, como ya no podía actuar,
entonces Dorian ya no está interesado en ella. Fríamente, decide romper
la promesa de matrimonio y no ver más a Sibyl. De regreso en casa, nota
que el cuadro de Basil ha cambiado, por lo que se da cuenta de que su
deseo se ha cumplido: el retrato tiene ahora una sutil mueca de
desprecio.
A partir de entonces, la edad y los pecados que Dorian cometa se
verán marcados en el retrato mientras que él mismo conservará su aspecto
exterior sin ningún cambio. Dorian decide reconciliarse con Sibyl, pero
a la mañana siguiente Lord Henry le da la noticia de que Sibyl se ha
suicidado tomando ácido prúsico.
Dorian oculta el cuadro en una habitación, a la que solamente él tiene
acceso. Durante los siguientes dieciocho años, Dorian experimentará
todos los vicios posibles, bajo la influencia de una “ponzoñosa” novela
francesa, obsequio de Lord Henry.
Una noche, antes de partir con destino a París,
Basil visita a Dorian en su casa para cuestionarlo acerca de todos los
rumores que circulan sobre sus pecados y vicios y sobre las personas
corrompidas por su influencia. Dorian culpa al propio Basil de su
destino y lo apuñala en un arranque de rabia. Para deshacerse del
cadáver, Dorian chantajea a Alan Campbell, un químico, para que destruya
el cuerpo con ácido. Buscando alivio y olvido para su crimen, Dorian
entra a un fumadero de opio.
Allí, James Vane, el hermano de Sybil, escucha a una mujer llamarlo
“Príncipe Encantador” y lo sigue con intenciones de matarlo, pero
desiste debido a que la apariencia juvenil de Dorian hace improbable que
haya estado involucrado en el suicidio de su hermana Sybil de dieciocho
años. James deja ir a Dorian. La mujer que conocía el sobrenombre
“Príncipe Encantador” se le acerca para reclamarle por no haberlo
matado, revelándole que Dorian no ha envejecido desde hace dieciocho
años, según ella, por un pacto con el diablo.
En el transcurso de una cena, Dorian se desmaya de terror al ver al
hermano de Sibyl Vane, James, acechándolo. Al día siguiente, durante una
partida de caza, James es alcanzado accidentalmente por un disparo
destinado a matar a una liebre. James Vane muere ahí mismo. Después de
regresar a Londres, Dorian informa a Lord Henry su decisión de enmendar
su camino. De ahora en adelante, corregirá su vida y por lo pronto
abandona, sin corromper, a su última conquista romántica: una bella
joven que vive en el campo llamada Hetty Merton. Lord Henry no cree que
esta acción sea sincera, mientras que Dorian se pregunta si este gesto
de renuncia al vicio se reflejará en el retrato, mejorando su aspecto.
Una vez que Lord Henry se retira, Dorian Gray entra a la habitación
donde ha mantenido su retrato escondido, pero descubre que ahora su
apariencia es aún peor. Se da cuenta de que el gesto que tuvo de dejar
intacta la virtud de Hetty fue provocado únicamente por vanidad,
curiosidad o búsqueda de nuevas sensaciones. Entonces descubre que solo
una confesión completa de sus pecados lo redimirá, pero no está
dispuesto a afrontar las consecuencias. En un arranque de furia, ataca
la pintura con el mismo cuchillo con el que asesinó a Basil. Los criados
escuchan un grito desde la habitación clausurada. La policía ya
alertada y los criados entran con algunas dificultades para encontrar el
retrato de su amo con la frescura y la lucidez de la adolescencia que
tenía antes. Al lado suyo, sin embargo, encuentran tirado en el piso el
cuerpo muerto de un hombre mayor consumido y decrépito, apuñalado en el
corazón, con un rostro repulsivo lleno de arrugas; sólo por medio de los
anillos de su mano son capaces de reconocerle como Dorian Gray.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja a tu continuación tu comentario. Si quieres puedes hacer referencia a un comentario anterior. Te rogamos, sabemos que va a ser así, hagas tus comentarios con respeto y lenguaje adecuados. Gracias.